Arriendo Moto: Desierto de Atacama y Ruta 40 con Marco e Isabel

Diciembre es un excelente mes para salir de la rutina, terminar el año viajando y comenzar uno nuevo en ruta. Los integrantes del Tour Patagonia & Tierra del Fuego no fueron los únicos en decidir experimentar una aventura de tal magnitud. Marco e Isabel, él italiano y ella española, también optaron por ser parte de nuestra comunidad de Riders y planificaron un viaje en pareja aprovechando el servicio de Arriendo Moto que brinda Ride True ADV.

Ride True ADV ofrece a todos los apasionados de viajes la posibilidad de descubrir en moto los países que siempre han soñado sirviéndose de su extensa red de partners especializados y que cuentan con los últimos modelos equipados con los mejores sistemas de seguridad y accesorios, con el objetivo de que puedan experimentar una aventura en tierras desconocidas con total confianza.

Marco e Isabel optaron por el Arriendo Moto de una BMW R1200GS Adventure equipada con las maletas laterales, bolsa de estanque y bolso seco. Su viaje fue de 17 días partiendo desde Santiago y recorriendo el norte de Chile y Argentina.

Ellos decidieron iniciar y terminar su viaje en Santiago de Chile, pero Ride True ADV ofrece la posibilidad de retirar la moto en una de las principales ciudades de país visitado y restituirla en otra ciudad del mismo país, sin tener que alterar el propio itinerario del viaje.

Marco e Isabel prepararon su propio itinerario; conocieron el maravilloso paso de Santiago a Mendoza a través del famoso tramo Los Caracoles, caracterizado por sus más de 25 curvas, algunas de 180° rumbo al Túnel del Cristo Redentor a casi 4000 metros sobre el nivel del mar.

Recorrieron Barreal, Cafayate, la Ruta 40; se mantuvieron siempre en altura enfrentando los 4200 metros sobre el nivel del mar al cruzar el Paso Jama. El año nuevo lo pasaron en Chile. Vivieron la experiencia del desierto de Atacama, el más árido del planeta. Desde Antofagasta a Chañaral: puro desierto. Y en un punto donde la ruta les ofrecía lo mejor de sus curvas a través de la mítica carretera Panamericana, con lluvia y niebla vivieron en extremo la aventura cuando casi se quedaron sin bencina.

Fueron días de ripio, asfalto, cruces de pasos fronterizos, desierto, desafíos climáticos e incluso a la altura. Pero como dice Marco, fueron una maravilla de 4733 kilómetros.

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